Las Delicias de Hirama, una historia de éxito.

En la República Dominicana hay una fuerte tendencia en negocios que venden productos o servicios a través de las redes sociales, lo cual ha sido bastante fructífero para muchas personas que han decidido emprender, como es el caso de Hirama de la Cruz, una joven gerente que Que por problemas de salud decidió dedicarse al mundo de la cocina. 

Entre risas, anécdotas y muchas emociones, Hirama cuenta sus inicios en la cocina y como ésta le cambió la vida. “Bueno, realmente en mi casa siempre se cocina mucho, yo soy de pueblo, de Hato Mayor del Rey. Son 8 hermanas, y siempre que se reúnen, obviamente hay que cocinar para todos, para los sobrinos, para los nietos, para todos; y mi mama siempre cocinó. Ella tuvo la gracia y la oportunidad de trabajar con árabes, entonces ahí aprendió a manejar ciertas harinas de trigo y demás. Yo nunca me adentré al 100%, yo siempre ayudaba a picar, ayudaba a limpiar, nunca lo hice, hasta hace 3 años que empezó el proyecto. Pero, fue mas que todo una necesidad por salud, porque yo siempre hacía muchos postres y algunas picaderas, entonces me vi en un tema de hipertensión y tenía que decidirme si quedarme en la casa o quedarme en el trabajo, donde tenía una posición gerencial, en el área logística, me generaba mucho estrés, entonces hicimos una pequeña reunión familiar y decidimos quedarnos en la casa, con la cocina” comenta Hirama. Sus inicios Comienza a hornear postres y a freír picaderas para sus compañeros de trabajo, a los que llama “sus primeros clientes”, quienes diariamente esperaban a Hirama para ver con qué delicia llegaría a la oficina, los mismos que se encargaron de ponerle el nombre al negocio, crear el logo y sobretodo convertirse en promotores de la marca. Para ella, todo fue fluyendo en orden divino, pues en ningún momento se imaginó que sería repostera ni que tendría tanto éxito en este tipo de negocio. Nunca estudió repostería ni hizo ningún curso de cocina, pero fue poco a poco aprendiendo a desenvolverse en ella y a poner atención a los detalles, que por su experiencia, es lo que marca la diferencia. Hirama cuenta que con su plato estrella, el famoso Flan, ha vivido muchos momentos divertidos y catastróficos, como en una ocasión que olvidó su mochila en una guagua de transporte público y tuvo que llamar hasta a Juan Ubieres, el presidente de Fenatrano para poder recuperarlos, y afortunadamente lo logró.  Un día normal en Delicias Hirama. Al preguntarle cómo es un día normal en Delicias Hirama, es fácil discernir que su tiempo de descanso es limitado: “Bueno, uno de los procesos o digamos de los productos claves son ahora mismo los desayunos personalizados, siempre solicito que me contacten por lo menos dos días antes porque hay que agotar detalles, un desayuno personalizado es personalizado, es lo que a la persona le gusta, si le gusta el pan en cuadritos, si le gusta solo con jamón, si le gusta con aderezo, sin aderezo; entonces, me gusta el tema del tiempo para agotar esos detalles, entonces, levantarme tempranísimo, dígase 4:30AM - 5:00AM, preparar los trastes, lavarlos, lavar las frutas… que sea todo el mismo día. Porque si tu lo haces el día antes eso se nota, se ve y se siente al comerlo, tiene que ser del mismo día”,  Entonces, ya después de ahí yo le dedico tiempo a las redes sociales, sea a subir el producto que salió recientemente o a tratar de depurar fotos, a atender mensajes de clientes, buscar nuevas opciones, trabajar mi inventario, verificar las ventas del mes, si puedo hacer algún especial, ese tipo de cosas. Salir de compras, obviamente a veces mi esposo me dice “trata de hacer una compra una o dos días a la semana”, pero es imposible, yo voy todos los días, todos los santos días yo voy al supermercado, todos los días; ya me conoce el gerente, la señora que limpia, los de caja... todos han probado porque a todos les llevo quipes, pastelitos” termina diciendo.  Surge la incógnita de qué pudo escogido hacer de no ser repostera, a lo cual respondió:  Yo he sido una persona muy atrevida siempre, yo soy de las personas que aceptan el cambio, sin frustración y sin tormento, si hay que irnos para otro salón yo no me quejo, “ay, hay que movernos a otro…”, okay, vámonos, entonces, creo que Dios quería que esto pasara porque en realidad yo hice un postre para mi cumpleaños, lo lleve a la oficina, a todos les gusto y eso fue lo que se replico varias veces, exactamente la misma receta, entonces creo que era algo que tenia que pasar. Si no me veo en la cocina, la cocina me ha dado la gracia y la oportunidad de estar cerca de mis hijos, entonces me veo como madre, de verdad porque el área de oficina es maravillosa, tú conoces mucha gente, haces mucho roce, pero te agota, te absorbe en la totalidad, consumiendo mucho tiempo”. El servicio es la diferencia. En vista de tantos negocios que ofrecen servicios similares, surge la incógnita de qué es lo que diferencia a Delicias Hirama de la competencia para lo que ésta respondió: “Mucha gente te va a hacer quizás un platillo más elaborado, quizás mucha gente te va a hacer un platillo distinto, porque la cocina es eso, es ser versátil, es probar, es reinventar cada día, en eso estamos claros. Un pastelito lo hace cualquiera, el tema es la dedicación, la pasión, el amor, yo siempre hago los productos y el tema de la terminación de ellos como si lo fuera a recibir yo. Mi esposo que es sumamente detallista, un hombre muy objetivo, es ingeniero civil, mira todos los detalles, si está, si no está, entonces como que pienso: “a Rubén le gustaría”, que yo se que el se fija en todo, tu sabes, entonces, creo que ese es mi plus. A lo largo de la conversación, Hirama con su tono elegante y amplia sonrisa, irradia ese amor por lo que hace sin importar qué. Dar lo mejor de sí misma ha sido la clave para materializar su proyecto y no termina la conversación sin llevar un mensaje a aquellos que al igual que ella, ya sea por razones de salud o por un cambio de vida, luchan por sacar un negocio hacia adelante. -Mira, emprender debe responder a una sola cosa, ¿te gusta? ¿te apasiona? ¿Por qué? Porque el sacrificio es muy amplio. Yo me vi a los 8 meses de quedarme sola en el proceso de Delicias que cerré todo, cerré la agenda, todo y dije ya no quiero nada, porque me levantaba muy temprano, o sea yo no dormía. Yo me acostaba a la 1 a las 2, esperando los flanes, cocinando, entonces, preparando los niños. Por la mañana el desayuno de los niños, la lonchera del esposo, y las de Delicias, y yo no tenia tiempo de nada, estaba agotada, muy agotada, me devolvió la inspiración el mismo seguimiento de la gente, “es que yo necesito que seas tú”. Hubo una señora que me espero, yo me sentía indispuesta, dije “mira, de verdad, trabajar así no puedo, y los postres necesitan cariño, y no me siento cómoda.” Y me dijo, “yo te espero 2 semanas” me espero 2 semanas por un flan para ella regalarlo a alguien, entonces, ese tipo de cosas te hace ver y entender que lo estás haciendo bien”. “Mi consejo numero uno es ser perseverante, ser perseverante, nada se consigue a la ligera. No es que tu seas perseverante en algo que tu veas que realmente no va a cumplir una meta, no va a ser realista, no va a cumplir tus expectativas. Yo no inicié Delicias Hirama por dinero, aunque desde el primer momento empezó a ser rentable, no fue el objetivo, no fue la necesidad, la necesidad era abastecer un momento de mi vida que se veía en juego estar de pie, respirar, yo necesitaba estar con mis hijos, necesitaba estar con mi mama, con mi marido, y si me moría no lo iba a hacer. Mi presión arterial ya estaba, una cosa desastrosa, yo parecía una señora de 80 años, y descubrí que realmente me gustaba la cocina. Si yo le hago a ustedes los cuentos de lo que yo he pasado en este proceso, no terminamos hoy, Cesar habla y yo por otro lado no terminaba, pero de verdad cuando vayan a emprender algo que sea una necesidad propia, satisfaces la tuya y la de los demás. Pero iniciar algo, a veces hay mucha gente que tiene un capital grandísimo, que pudiera hacerlo y no puede, y a los 8 meses tu ves un cerrado. Eso no, eso no funciona así, emprender no funciona así. Tiene que ser algo que en verdad te apasione para que esa pasión te de la resistencia”. Hirama De la Cruz, propietaria del negocio Delicias Hirama y catalogada como “La Reina del Flan” es una mujer que tiene claro que todo en esta vida se basa en precios y en recompensas, pero que más allá de eso, el trabajo duro es la clave para vivir una vida plena y feliz.